Estudios y Noticias Por Janice Friedman
Aunque la palabra “inteligencia” no tiene una sola definición, se asocia universalmente con términos como el conocimiento, la capacidad mental, el razonamiento, el juicio, la imaginación, la función cognitiva y, ocasionalmente, la adaptación. A lo largo de los años, la noción más común con respecto a la “inteligencia” es que simplemente es un atributo deseable, ventajoso y buscado. Esto ha allanado el camino para que cada vez más investigaciones estén dirigidas a descubrir los cómos y los porqués de la adquisición de inteligencia.
Con numerosos y continuos debates sobre inteligencia, la mayoría de nosotros nos preguntamos, ¿de dónde viene realmente la inteligencia? ¿La inteligencia es genética? ¿O es el resultado de influencias ambientales y de desarrollo? Profunvamos los detalles de los dos factores.
El papel de la herencia
El hecho de que la genética afecte o influya significativamente en la inteligencia está fuera de toda duda, pero ¿cómo se demuestra? Aquí hay dos puntos de vista de los cuales se deriva la determinación de la heredabilidad de la inteligencia:
Enfoque estructural
Los estudios sobre la heribilidad de la inteligencia comenzaron hace más de un siglo. La relación entre la genética y la inteligencia también se ha estudiado a través de la estructura cerebral. Un enfoque muy comprensible para correlacionar la inteligencia general con el cerebro es a través de imágenes estructurales del volumen de materia blanca y gris del cerebro. En un estudio realizado por Toga y Thompson (2005) titulado Genética de la estructura e inteligenciacerebral, se afirmó que “el mapeo cerebral estructural, en cambio, ya ha mostrado patrones específicos relacionados con la inteligencia y, al igual que con otros estudios de mapeo cerebral, puede proporcionar el marco anatómico para lograr una mejor sensibilidad en los estudios funcionales”.
Para poder establecer el vínculo entre las medidas cerebrales y la genética y comprender las causas de la variabilidad morfológica y funcional entre los sujetos del experimento, la metodología fue diseñada para fusionar los resultados de la imagen con las estadísticas genéticas para poder para cuantificar las influencias genéticas en el cerebro. Se ha demostrado que la estructura cerebral medida mediante imágenes por resonancia magnética (RM) se correlaciona con las puntuaciones de las pruebas de inteligencia. La misma correlación se observa con volúmenes individuales de los lóbulos cerebrales y el volumen acumulativo de materia gris y blanca. Se descubrió que hay una aparente relación entre el volumen cerebral localizado y la inteligencia. También se demostró repetidamente que la densidad de materia gris es heritable, y que la morfología cerebral resulta de contribuciones familiares hasta cierto punto.
En resumen, la heribilidad de la inteligencia se puede probar a través de imágenes de estructura cerebral. Debido a que hay relaciones correlativas entre la estructura cerebral y las puntuaciones de las pruebas de coeficiente intelectual, y entre la estructura cerebral y los genes, es seguro concluir que la estructura cerebral vincula la influencia genética y la inteligencia en un enfoque cuantitativo y integral. Además, se ha demostrado que los factores genéticos son relevantes para la estructura cerebral distinta y para dar forma a la propia inteligencia.
Enfoque psicológico
Otra forma de demostrar que la inteligencia es realmente genética es a través de un enfoque psicológico. Chabris et al (2011) afirmaron en su publicación que la genética potencialmente tiene contribuciones significativas a la psicología y otras ciencias sociales. En primer lugar, la expresión genética afecta en gran medida la fisiología innata y el desarrollo del cerebro. A través de una comprensión más profunda de los genes, podemos comprender más los fundamentos que contribuyen a la evolución y el comportamiento, incluida la inteligencia. En segundo lugar, las diferencias individuales en la función cognitiva y los patrones de comportamiento son causadas principalmente por diferencias genéticas. Por lo tanto, entender estas diferencias a través de la genética definitivamente puede proporcionar las explicaciones más sucintas y lógicas.
Se ha demostrado repetitivamente a través de diversos enfoques y metodologías, que los genes juegan un papel muy crucial en la inteligencia.Los científicos también han aprendido que la heribilidad no sólo se aplica a la inteligencia, sino más importante, a todos los aspectos del comportamiento también.
Sin embargo, gran parte de las especulaciones sobre inteligencia y genes casi siempre incluyen el factor de influencias ambientales. Como Han señalado Toga y Thompson (2005), “las correlaciones entre individuos relacionados muestran que tanto la naturaleza como la nutrición influyen en la inteligencia”. Esta visión nos lleva a un mejor punto de vista que los genes por sí solos no pueden tener en cuenta únicamente la inteligencia.
Inteligencia: Un problema complejo
El concepto de inteligencia múltiple ha existido durante décadas y ha coincidido con la teoría de que la inteligencia no sólo se limita al cicondo de inteligencia o de inteligencia. Los psicólogos principales han debatido sobre tal concepto, ya que supuestamente carece de evidencia empírica y cuantitativa. Las ocho habilidades que son linguísticas, lógica-matemáticas, espaciales, interpersonales, intrapersonales, naturalistas, leales-cinéticas y musicales son subjetivas y pueden depender del juicio personal.
Sin embargo, la inteligencia, en cualquier forma, tiene un propósito general y último que es la supervivencia. En una publicación de E.S. Williams sobre la inteligencia como clave para la supervivencia, se declaró que la inteligencia de un hombre es el atributo dominante por el cual sobrevive a su entorno especialmente en condiciones extremas. La inteligencia también se ha relacionado con la evolución por la que la concepción de la “supervivencia del más apto” es de primer interés. Nuevos estudios están sondeando ahora la posibilidad de que la inteligencia simplemente podría ser una forma evolucionada de estrategia de supervivencia.
Con la teoría de la inteligencia múltiple cada vez más aceptada en el mundo moderno, además de la creencia de que la inteligencia es una estrategia de supervivencia, el concepto de “inteligencia” se ha vuelto más complejo en sí mismo. Como resultado, la interacción entre los genes y el medio ambiente genera infinitas posibilidades y complejidades que más tarde se convertirán en objeto de futuras investigaciones.
Entonces, ¿la inteligencia es la naturaleza o la nutrición?
Lo que hay que probar ahora es cómo la naturaleza (genética) y la nutrición (medio ambiente) influyen o afectan la inteligencia. Desde que el artículo “Intelligence: Knowns and Unknowns” de Neisser et al fue publicado en 1996, mucho se ha entendido con respecto a la relación sinérgica entre los genes y el medio ambiente. En el artículo, se discutió y hizo hincapié en que la expresión genética implica un medio ambiente, ya sea ecológico o bioquímico. Un entorno ecológico se refiere a un entorno sociocultural o interpersonal, mientras que un entorno bioquímico se refiere a las condiciones fisiológicas y anatómicas del cuerpo humano.
Cuando se desarrollan rasgos fenotípicos (atributos perceptibles de la composición genética), es muy posible que una aportación ambiental pueda modificarlos hasta cierto punto. Por el contrario, los efectos ambientales no pueden manifestarse sin la presencia de una estructura preexistente, como una estructura genética, sobre la que actuar. Además, el término “medio ambiente” abarca una amplia gama de factores, incluyendo interacciones dentro de la familia, clase social, nutrición, salud, e incluso productos farmacéuticos que mejoran la cognitiveia. Por lo tanto, se convierte claramente en una interacción de ambos factores. Entonces, ¿la inteligencia es la naturaleza o la nutrición? La respuesta final es: es una combinación de ambos.
Referencias
- http://www.vetta.org/documents/A-Collection-of-Definitions-of-Intelligence.pdf
- http://aplus-schools.uncg.edu/multipleintelligences.pdf
- http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC1985171/
- http://www.loni.ucla.edu/~thompson/PDF/TT_ARN05.pdf
- http://economics.cornell.edu/dbenjamin/IQ-SNPs-PsychSci-20111205-accepted.pdf
- http://www.gifted.uconn.edu/siegle/research/correlation/intelligence.pdf
Janice Friedman